Vancouver: luz de agosto en la bahía. (Fotografía de Jules Etienne).

miércoles, 27 de enero de 2016

Unicornios: ELFLEDA, de Vonda N. McIntyre

"... de su frente surge un delgado cuerno en espiral. Su copete plateado oculta la cicatriz donde nace..."
 
(Fragmento inicial)
 
La amo. Y la envidio, porque es tan lista, tan desafiante como para burlarse de nuestros creadores. O de la mayoría de ellos. Ella no es un verdadero unicornio: muchos de nosotros tenemos partes humanas y ella no es la excepción. De otra manera las conexiones serían demasiado complicadas. Nuestros brillantes creadores no lo son tanto como para integrar los nervios directamente desde el cerebro.
 
Así que Elfleda* es como yo, casi enteramente humana en la parte superior del cuerpo. Debajo de mis caderas soy un equino: un centauro. Ella es unicornio, tiene pezuñas, su cola es la de un león y de su frente surge un delgado cuerno en espiral. Su copete plateado oculta la cicatriz donde nace y la cabellera de plata cae sobre sus hombros y la espalda. Su cuerpo es de un gris pálido con grandes manchas en los costados. La punta de su cola es de color negro. Durante mucho tiempo creí que algún cirujano había cometido un error o le había jugado una broma pesada, pero eventualmente comprendí porqué estaba hecha de esa manera, cuando desde lejos la observé crispar como un gato su larga cola de punta negra. Mi cuerpo carece de esa originalidad artística. Odio como soy casi tanto como amo todo en Elfleda.


Vonda N. McIntyre (Estados Unidos, 1948)
 
* Elfleda es un relato futurista en el que los protagonistas han sido creados por la ingeniería genética, como es el caso del unicornio que da su nombre al texto.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario