Regresa la primavera a Vancouver.

lunes, 30 de mayo de 2011

También era un lunes



"El día 30 de mayo de 1887 cayó en lunes. Era una de las festividades nacionales en el último tercio del siglo XIX, y se le conocía con el nombre del Día de la Condecoración, por estar destinada a rendir honores a la memoria de los soldados del Norte que habían tomado parte en la guerra defendiendo la unión de los Estados. Los sobrevivientes de la lucha, acompañados por manifestaciones y bandas de música civiles y militares, en ceremonia tan solemne como emotiva, iban entonces a visitar los cementerios y en ellos depositaban ofrendas de flores sobre las tumbas de sus camaradas. El hermano mayor de Edith Bartlett había caído en una batalla y yacía en Mount Auburn, adonde la familia había adquirido el hábito de ir en ese día."

El párrafo anterior corresponde al principio del segundo capítulo de la novela Mirando atrás (Looking Backward), escrita por Edward Bellamy y publicada en 1888. En su época, llegó a considerarse como una de las más populares en los Estados Unidos, al lado de La cabaña del tío Tom, de Harriet Beecher Stowe, y Ben-Hur, de Lewis Wallace. Su protagonista, Julian West, es un bostoniano de clase acomodada que padece de insomnio, por lo que se había visto obligado a construir una recámara subterránea y hermética, -de reminiscencias proustianas, aunque justo es reconocer que la heptalogía de En busca del tiempo perdido se comenzó a escribir hasta 1908-, debajo de su casa, para poder permanecer aislado del exterior: "Cuando una vez adentro se cerraba la puerta, parecía envuelta por el silencio de una tumba". El personaje, tras despedirse de su prometida, le indica a Sawyer, su criado, que lo despierte a las nueve de la mañana y se retira a dormir.

Al abrir los ojos se encuentra en un lugar diferente, en una casa ajena y ante la presencia de un extraño. Inquiere por su criado y el desconocido le responde que no le puede contestar con exactitud, a su vez le pregunta cuándo fue que se durmió. West precisa que era el Día de la Condecoración (esa fecha festiva se transformó en lo que en la actualidad se conoce como Memorial Day y se celebra justo el día de hoy). Al percibir el desconcierto de su interlocutor considera la posibilidad de haber dormido durante un día entero y de que ya fuese el mes de junio. Éste le aclara que es septiembre, le toma el pulso y le pide precisar el año: "Fue en 1887". Entonces procede a explicarle:

"Su aspecto es el de un joven de unos treinta años y su estado físico no difiere mucho del esperado en una persona que ha permanecido dormida durante tanto tiempo de manera profunda y tranquila, a pesar de todo lo cual, hoy es el día diez de septiembre del año 2000 y usted ha dormido exactamente cientro trece años, tres meses y cinco días."

Mañana martes concluiré mayo refiriéndome a algunos poemas que se ocupan de este mes que se acaba, para después retomar de nueva cuenta la novela de Bellamy, utopista que podría ubicarse entre la vocación profética de Jules Verne y el ambiente de las primeras novelas de Aldous Huxley, como Los escándalos de Crome.


La ilustración corresponde a la celebración del Día de la Condecoración (Decoration Day), en Scollay Square, en la ciudad de Boston, a finales del siglo XIX. Forma parte de la colección de Robert N. Dennis.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario